EL PAISAJE HUMANO
Joel Corrales Márquez (La Habana, 1985) participa en la agitada y propositiva plástica contemporánea de Cuba con su irreverente y a la vez apacible recreación del paisaje a escala humana. Las calles y su arquitectura vieja, deteriorada, a veces ruinosa, sirven de lecho para los cuerpos humanos más grandes del mundo. Al presentar a 11 artistas plásticos cubanos del siglo XXI para el extraordinario libro Revelación (Galería 10/10, Ciudad de México, 2010), la crítica Martha Zamora describe así los paisajes de Corrales Márquez:
“La arquitectura habanera semi derruida, carcomida por el tiempo y el nulo mantenimiento, soporta los cuerpos gigantescos de personajes adormilados cuyas características, hasta el mínimo detalle de las venas de los pies, los hacen perfectamente reconocibles. La suavidad de un perfecto desnudo femenino enorme descansa tranquilamente en la azotea de dos casas con vitrales incompletos y bella herrería. Un campesino se adormila sobre un paisaje con palmeras, bajo un cielo azul y sol inclemente en una obra maestra realizada por este joven maestro”.