PANCHO VILLA 1923-2023: AYER, HOY Y MAÑANA
Gabriel García Márquez
Rápido y Furioso. Así fue el deplorable asesinato contra Pancho Villa ocurrido el 20 de julio de 1923 en Parral, Chihuahua, cuando había depuesto las armas un 28 de julio de 1920. A un siglo de ocurrida la muerte de José Doroteo Arango Aránbula, éste vive en su Museo CasaSola de Canutillo, Texas. Algo parecido a cuando vivió en El Paso, Texas en 1914, y el gobierno de Estados Unidos le otorgó, por orden ejecutiva, la ciudadanía estadunidense por sus invaluables servicios prestados para instalar en la presidencia de México al mártir de la revolución Francisco I. Madero. La diferencia es que Villa “reside” en Estados Unidos por voluntad popular y de los Museos CasaSola, para que su ejemplo permita recuperar la memoria colectiva perdida mediante una exhibición iconográfica intinerante educativa preparada en su memoria para el mes de julio, acompañada por charros mexicanos de Nuevo México.
Rápido y Furioso fue también el ataque de EU a México cuando, con el pretexto de perseguir al general Francisco Villa, durante 18 meses (1916-1917) invadió al país en plena Revolución Mexicana, misma que intentaba defender su soberanía, recursos naturales y la autodeterminación de su pueblo para vivir en plena libertad en contra de la dictadura de Porfirio Díaz y los intereses extranjeros que se habían apoderado de los bienes nacionales por 34 largos años de dominación.
A un siglo de distancia y de las mutaciones presentadas en el tiempo en las relaciones México-EU, ha sido necesario utilizar una nueva narrativa que reivindique a Pancho Villa, Emiliano Zapata y todos los mexicanos que creyeron en una revolución inducida, misma que fue utilizada tiempo atrás por los vecinos en forma rápida y furiosa para apoderarse del 54% del territorio nacional, justo cuando apenas se empezaba a construir un país, invadido por España durante varios siglos de dominación.
Aquí nos detenemos para recordar y cuestionarnos las palabras dedicadas por Eduardo Galeano a nuestro libro Juárez, Laboratorio de Nuestro Futuro: “Podemos ser como ellos”, refiriéndose al país del “sueño americano”. “Sueños y pesadillas están hechos con los mismos materiales. Pero estas pesadillas se constituyen como el único sueño que nosotros permitimos: un modelo de desarrollo que idealiza las cosas”. Es obvio que México no puede ser como el país de la barras y las estrellas. Menos aún cuando el destino de vivir con ellos ha estado marcado por la dominación.
Sin embargo, es necesario decir que muchos de los millones de mexicanos que radican en Estados Unidos, incluidos los “soñadores” y los más de 10 millones que esperan regularizar su situación migratoria, desconocen su historia y las causas reales de vivir bajo la sombras de la deportación. Según hemos constatado en el Laboratorio de Nuestro Futuro México-EU, es necesario mostrar las evidencias iconográficas existentes dentro del modelo de una educación liberal ilustrativa, cultural, artística y social que les ayude a dignificarse o revaluarse ante una sociedad que los discrimina y devalúa para que continúe la dominación desde las mutaciones colonizadoras.
Realizamos una selección especial de ilustraciones captadas por fotoperiodistas de ambos lados de la frontera, invitados a participar con Agustín Víctor Casasola, desde los tiempos del porfirismo, así como los que en forma individual cubrieron una época de oro de la fotografía mexicana en tiempos de la Revolución.
La contribución de los fotoperiodistas a la historia gráfica es enorme, como lo hemos constatado una y mil veces, al contemplar sus espléndidos trabajos que muestran al desnudo una realidad que a veces no quisiéramos ver por crudeza y autenticidad que devela testimonios que quisiéramos que no fueran verdad: pobreza, violencia y demás atrocidades que nos indican que el tiempo está salido de sus goznes a causa de la decadencia humana, como lo describe Simon Heffer en su historia sobre Inglaterra 1880-1914, donde destaca magistralmente la era vivida por el imperio madre y el imperio moderno surgido de la invasión al continente indígena de la América Ocupada.
Ello nos lleva a comprender la conexión de la invasión a Veracruz en 1914 cuando EU e Inglaterra estaban ya subidos al barco de la Primera Guerra Mundial con sus tanques de combustible cargados con petróleo y carbón mexicano, despojando la marina de EU a un país en plena revolución, mientras se mataba al presidente Madero. Estas imágenes emergen de la realidad cuando el general brigadier más laureado de la Marina de EU, Smedley D. Butler, confiesa sus órdenes recibidas para invadir países y matar a los supuestos enemigos de su país en favor de Wall Street, sus banqueros, corporaciones y millonarios amafiados al poder.
Con la conmemoración de un siglo de ocurrida la muerte de Pancho Villa, se darán a conocer los nombres de los culpables intelectuales de las invasiones ocurridas en México 1914-1919. “Partir es morir un poco”. Hacía mucho que la historia no se veía recompensada con una sorpresa tan sensacional (Jacques Stemberg).
Pancho Villa CasaSola Museums & Carlos U. Vigueras