POEMAS DEL SON
CITLALY MALPICA
LAS MÁSCARAS EN EL SUELO
No había encontrado la paz,
había olvidado que aquí
empiezo a quererme a mí
y después a los demás.
Pero ahora soy capaz
de abrir los brazos al cielo.
Lo miro, calculo el vuelo
respiro, vuelvo a mirar,
al fin me atreví a dejar
las máscaras en el suelo.
Mis pies se levantarán
bailando sobre las nubes
y en los pueblos donde estuve
las tierras florecerán.
Silentes se escucharán
los aires con su vaivén.
Sé que todo estará bien,
aun en las noches más largas
con sus formas amargas
me levantaré también.
FLOR DE NARANJA
Flor de naranja, pomela
espuma de margarita
orquídea, dulce negrita
alcatraz color canela,
voy a buscarte en la estela
en el sol de invernadero,
perfume verde de uvero
cardón de la serranía,
y cada vez que sonría
te voy a decir: te quiero.
CROMÁTICO
¿Cómo haré cuando en la
calma
sepa que al fin he podido
iniciar mi cometido
de desbaratarme el alma?
Cuando explote como palma
al nacimiento de un verso,
¿cómo haré, cuando el
disperso
sentimiento abandonado
sepa que al fin ha encontrado
la verdad del universo?
NACIMIENTO
Dicen que un día nació el son
como un acto necesario
y entonces del canto diario
nació una revolución.
Dicen que un gran ventarrón
tarareaba melodías,
que de los campos venían,
bajaban desde la sierra
y cantaban a la tierra
la memoria de sus días.